Eran las 11.00 h. de la mañana. Sentado en un roñoso sofá que antaño había sido blanco, divisé a través de la ventana como las nubes se tornaban de color plomizo; casi negro. A lo lejos, el centelleo de un aguacero, con enérgico aparato eléctrico iba tomando cuerpo. El estruendo de un trueno acalló cualquier duda. Me estaba corroyendo la pereza y la inacción. Desde mi reciente inactividad, al embargarme el Ayuntamiento mi puesto ambulante de globos y confetis, mi actividad diaria se limitaba a lecturas acerca de demencias esquizoides y al cálculo de complejos logaritmos. Estaba hastiado. Ladeando mi macrocefálica cabeza observé durante unos instantes el teléfono que reposaba en la encarroñada mesita del salón que astutamente había usurpado de un mercadillo. Con voz hierática llamé a la policía. Empecé a respirar honda y sosegadamente, y tras segundos de silencio meditativo, confesé un crimen que no había cometido. Tras colgar, comencé a reír en silencio de forma espantosa. El teléfono empezó a timbrar. Un escalofrío recorrió mi deformado y mantecoso cuerpo al tiempo que se me erizaba el vello púbico. A la policía no le agradaba aquel tipo de bromas. -“Hola buenos días. Mi nombre es Jennifer Villegas. Le llamo de yazteld. ¿Es usted el titular de la línea?"-. -"¡Me cago en la puta!" - susurré elegantemente en voz baja. Aquella desgraciada me había dado un susto de muerte. -“ No. Soy un ladrón, y ahora mismo estoy muy ocupado”- contesté enojado mientras colgaba con ensañamiento el teléfono. Me acordé entonces de las chanzas y fechorías que perpetrábamos de pequeños con mi buen amigo Evaristo. Recordé como cabreábamos al heladero de nuestro barrio hablándole en un lenguaje inventado y que sólo nosotros conocíamos. Decidí romper con la monotonía y poner en práctica aquella técnica que tanto nos había divertido. Tremendamente desaseado, me enfundé mi viejo chándal de lona gris y unas deportivas, y me dirigí a una afamada tienda de moda masculina. Quería explayarme. Necesitaba distraerme. Precisaba desahogarme. Entré en el establecimiento a cuatro patas, manteniendo el cuerpo ligeramente oblicuo, tal primate merodeando por la jungla. Aquel comercio rezumaba elegancia y distinción por sus cuatro paredes. Decorada en tonos ocres y amoblada con exquisitas butacas en terciopelo rojo, el establecimiento ofrecía trajes y calzado de primeras marcas a precios onerosos e inasequibles. Con la mejor de las sonrisas e insólita amabilidad tras verme caminar como un vulgar macaco, una dependienta de labios siliconados se acercó a mí:
-“Buenos días, caballero. ¿ En qué puedo ayudarle?”.
-“ grhhh muksa pinkora mui” - contesté en un gruñido salvaje, casi en decibelios imposibles.
-“ ¿Perdón?. No le entiendo...¿Cómo dice?”- rogó atónita la bella dependienta.
-“grhhh muksa pinkora mui, ¡¡sucia cenutria!!”- repliqué en un evidente signo de contrariedad. Frunciendo el ceño, la empleada me miró aturdida. El desconcierto la hacía parecer aún más seductora. Pude descubrir en su mirada un sentimiento mixto de cólera y compasión.
-“grhhh muksa pinkora mui, ¡payasa!”- repetí en una simulada indignación por no entenderme. La vendedora, estoicamente paciente, negaba vacilante con la cabeza mientras escrutaba mi miserable aspecto.
-" grhhh gupy tus tus, birmyé, ¡coño!"- bramé imitando el lazado de unos zapatos.
-"Ahh!!!...Usted quiere unos zapatos.."- dedujo rápidamente. De su rostro se había borrado por completo la risueña sonrisa. -"Si quiere acompañarme..."- me sugirió con desazón.
Seguí a gatas a la cenceña muchacha sin poder reprimir una carcajada. Los empleados y clientes me miraron atónitos de arriba a abajo, chismorreando entre ellos.
Con un eructal berrido indescifrable, le señalé el calzado de ante claro que quería probarme. Entré en un elegante probador estucado en madera. Sus focos desprendían un calor infernal. Me enfundé los zapatos de ante egipcio y empecé a ejercitarme con tres series de 75 abdominales, con un triple objetivo: sudar, sudar y sudar. Después de la primera serie, mi psoriásica frente se perló de sudor. Tras la segunda, mis sucias manos gotearon como el rocío en la noche. Al finalizar la tercera, mis velludos pies transpiraron de tal manera que el calzado había quedado totalmente impregnado de mis hediondas secreciones sudoríparas. Devolví los zapatos ya teñidos. Con un salvaje gruñido de jabalí malherido, indiqué a la señorita que aquel botín no era de mi talla. Visiblemente encrespada, me hizo entrega de otro zueco de talla superior. Repetí la operación. Pero esta vez con flexiones. El calor de aquel vestuario era opresivo. Tras la conclusión del ejercicio, friccioné burdamente los zapatos contra mis axilas tal toalla después de una relajante ducha.
-"No, no. Mrcham gtus gtus puis"- advertí a la empleada.
La mujer me observó con ojos inyectados en sangre, en una mirada colmada de odio. Me ofreció otro calzado talla 44. Quedaba mi último ejercicio de aquella improvisada tabla de gimnasia: 100 repeticiones del célebre giro de David Bisbal. Atrozmente aturdido al finalizar mi actuación por la complejidad de aquellas piruetas, y totalmente empapado de pestífera sudación, froté con violencia los zapatos de piel albina contra mi zona escrotal. Salí del probador con fingida actitud de cabreo. Lancé con desprecio el calzado contra el mostrador. Pero entonces los vi. No tenía intención alguna de adquirir unos zapatos nuevos, pero aquel par de zuecos me fascinaron. Cazado italiano, finos, de cuero genuino. Sin dudarlo un instante los compré indicándole a la dependienta que sólo necesitaba el zapato del pie derecho.
Jartón de reír!!! Por Dios qué bueno!!!
ResponderEliminarUsted tiene pinta de gritar UUUUUUUUUUUUH al reírse.
EliminarPues le quedan la mar de bien los zapatos.
ResponderEliminarUn beso.
Ideales para matar polillas, amiga Maite.
EliminarO para bailar unas sardanas,,,
EliminarNo sé, ni que decir...
ResponderEliminarPues eso, no diga nada.
EliminarPoz me callo.
EliminarTio eres muy ingenioso XD yo, ni con muuuucho tiempo libre llegaría a plantearme historias tan buenas xD.
ResponderEliminarMe da a mi que mi cabeza no da pa tanto... me postro ante sus pies monsieur ;)
Si quiere postrarse ante mis pies, usted mismo, pero ni se le ocurra levantar la cabeza amigo Jaime.
EliminarJAJAJAJAJAJAJAJAJA
ResponderEliminar¿y usa calcetines??
Sí. De látex.
EliminarOiga!!!!, pues ese zapato tiene un "nosequé" que me gusta mucho... :)
ResponderEliminarMuaks.
Se lo dejo cuando quiera amiga Edurne. Es muy agradable al tacto.
Eliminarjajajajajaja. Se lo agradezco, pero creo que declinaré su invitación. Tiene pinta de morder.
EliminarBesos.
puaaaaaaj XD jajajajaaa menos mal que alguien me hace reír¡¡ muy bueno :P
ResponderEliminar¿ Lo dice por mí?
EliminarIncreíble. ¿ podría volver a la tienda y adquirir el zapato izquierdo?. Es que yo soy zurdo.
ResponderEliminarNo mientra bribón, que disparó su pistola con la zurda.
EliminarJe...que pasada, como siempre sacandome las mejores sonrisas.
ResponderEliminarBesos Don prepuzio.
Ya quisiera sacarle yo otras cosas,,,,
EliminarNo se envalentone usted...
EliminarPUAHHHHH macho, que wueno eres!!!!
ResponderEliminarBuenísima la entrada!!!!
Gracias mamá.
EliminarGrande
ResponderEliminarSus orejas amigo Isra.
EliminarMe ha encantado lo de la llamada a la policía! jajaja Que grande! Un placer leerle, como siempre.
ResponderEliminarUn placer que pase por estos lares querida vecina.
Eliminar¿Qué pie calza?
ResponderEliminarUn 32, y usted?
Eliminar¿Por qué no cambia el nombre del blog por "crónicas de un obseso del pene"??
ResponderEliminarCreo, que le haría más justicia...
De hecho, a mi me parece muy obseso y poco capullo.
Alguien que declara públicamente que su interés principal es el pene, merece por adelantado, todos mis respetos. Si ese alguien hace que me pegue unas risas increíbles con su blog...¡se ha ganado la pesadilla! Es decir: yo. Visitaré el blog siempre que me deje.
EliminarAmbos tienen razón.
EliminarAmigo alopécico, me quedo con su propuesta.
jajaja! seeeh! zapatos pénicos es la corriente filosófica del futuro, la ideología por antonomasia, la religión suprema y absoluta!!!
ResponderEliminarMe apunto a la secta!
¿hace descuento si traigo a un amigo?
¿ De qué coño está hablando? ¿ Qué se ha fumado usted?
EliminarTío como mola tu blog, me descojono cada vez que me da por echarle un vistazo xDDD
ResponderEliminarPues no entre más si quiere conservar su glándula testicular.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPor qué ha suprimido el comentario, eh, eh, eh ?
EliminarMadre mía, qué fiel reflejo de esta sociedad. La expresión de la nariz-glande saliendo intentando salir de la madriguera lo dice todo. Muy bueno.
ResponderEliminarPor cierto, ¿ Las tienen de color beige?
Interesante su interpretación de mi post amigo Juan José.
Eliminary releo el post y vuelvo a descojonarme...
EliminarEsto es humor y lo demás son tonterías!
ResponderEliminarSombrerazo Her Prepuzio.
Diga que sí amigo Txomin, que usted es de Bilbao!
EliminarY ahora como lo hace?¿
ResponderEliminarVa al podólogo o al urólogo?¿
Besikos.
La lacerante realidad, amiga Ayda, es que voy al psiquiatra.
Eliminar¡Bravo! Así se forja un héroe, Sir Prepuzio: olvidando todo escrúpulo, cabreando a la dependienta y enfundándose la chancleta en el pene.
ResponderEliminarSoberbio.
Sólo me he sentido héroe dejando paso a las ambulancias, amigo Mr. Triky.
EliminarEse fascinante sentimiento también lo tengo yo.
EliminarPues, alé, a hacer el camino de Santiago con zapatos nuevos.
ResponderEliminarMejor me voy a al Santuario de Lourdes.
Eliminarjoéeeer que peludo tiene el pie!
ResponderEliminarY si se fija bien, con ladillas,,,,
EliminarJAJAJAJAJAJA
ResponderEliminarJAJAJAJAJAJA
JAJAJAJJAJAJA
DIOS!!! ME HAS HECHO REIR EN VOZ ALTA!!!
Me alegra.
EliminarQue gran compa!!!!
ResponderEliminarMolts ànims i millora't!!!
Cesc.
Gràcies amic. A la pota coixa.
EliminarMe han hecho enarcar la ceja de sorpresa, al ver el sorprendente final,,,
ResponderEliminarLástima que no le produjera un infarto,,,
Eliminar¡Enhorabuena! Es genial. Con lo que quiero decir que es genial absolutamente, absolutamente genial.
ResponderEliminar¿ Es un trabalenguas?
EliminarEse pie quedaría mucho más bello y apetecible si estuviese descalzo.
ResponderEliminarSr. Prepuzio, usted y yo tenemos algo en común: los dos nos interesamos por el pene!
Y ahora estoy haciendo cálculos: si usted pidió el zapato derecho, debe eso querer decir que usted carga hacia la izquierda?
Si estás interesada en el pene, yo puedo ofrecerte uno, si me permites la licencia ;).
EliminarSiempre cargo con la izquierda amiga Belkis. Pero me gusta embestir frontalmente.
EliminarJavi, te la permito.
Eliminarque pasote, pasoteeeeeeeeeeeeeeeeee.
ResponderEliminarTeneis direccion de susbcricion???
ya..pero ya!!!
saludosss
Si le soy sincero, tenía previsto ponerlo en este blog, pero no tengo ni puta idea de como hacerlo.
EliminarSe aceptan consejos.
Anónimo anterior: si la consigues,pásamela! Que me paso media vida vigilando este blog, a falta de poder vigilar (de arriba a abajo) a su propietario jejeje.
ResponderEliminarPero creo que ayudaría crearte un perfil blogger y hacer seguimiento de los comentarios: algo ayuda!
Usted ya sabe dónde encontrarme,,,
EliminarEstupendo! Genial! Qué bigotes tiene usted!! Soberbios!!
ResponderEliminarIgnoro a lo que se refiere amigo Javi. Mi único bigote se halla en mi entrepierna.
Eliminarfendita zozofra! espiasmos cusculares, caspita, y chiribitas! Como me he quedado al leer su post,,, jajajaja
ResponderEliminarfueno... ai, me meo
Deje de beber por las noches, amigo Bigotes.
EliminarJajajajaja Qué risas!!!
ResponderEliminarY qué buena está usted.
EliminarMuy cruda su entrada. ¿Esto podría pasar por spam?
ResponderEliminarCierto.
EliminarJajaja bugurutal. Sí señor. Sí mi Lord!
ResponderEliminar¿ Bugurutal? Desconozco dicho vocablo.
EliminarAY, qué bueno, truhán!!!
ResponderEliminarAhora a ver si tienes güevos de pedir dónde está una calle a un guardia urbano, jajajaja
No sería la primera vez que lo hiciera,,,
Eliminarjajajajajaja
ResponderEliminarEstos nuevos zapatos son ideales para hacer el célebre paso de Chiquito.
Y para realizar saltos de longitud,,,
EliminarGENIAL.
ResponderEliminarUsted está como un quesito.
EliminarQue idea más buena me ha dado para cuando me llamen los de Jazztel.
ResponderEliminarPruébelo, verá como alegra el día a la teleoperadora.
EliminarAhora sólo le queda aprender alemán y prostituirse.
ResponderEliminarHe dicho.
Estos requisitos ya los cumplo,,,
EliminarEstas son las botas que utiliza Pepe del R. Madrid.
ResponderEliminarMe temo amigo de ojos polihexagonales que Pepe utiliza zapatos empleados por los operarios de la industria siderometalúrgica.
EliminarExcelente post mis mas cordiales felicitaciones, me ha gustado mucho su blog, un cordial saludo.
ResponderEliminarPues pásese por aquí cuantas veces quiera.
EliminarLa leche, Her Prepuzio, hoy se ha superado de todas, todas.
ResponderEliminarQuiero unos zapatos iguales.
No. Son personales e intransferibles.
EliminarEs reconfortante saber que no soy el único sociópata al que se le va la pinza, aunque yo apenas hace un mes que empecé con mi absurdo blog a dar muestras de que algo no va bien en mi escasa materia gris.
ResponderEliminarUn saludo
Sumamente interesante su blog amigo Fistular,,,,
EliminarJajajajaja, he tenido que mirar dos veces, "menudo pie más peludo" me decía, será la falta de costumbre.
ResponderEliminarAnastasio, es la primera vez que leo que en una tienda de zapatos hay probadores pero visto lo que hace en ellos creo que son totalmente desaconsejables. Espero que no comparta usted tienda de ropa con nadie que conozca.
¿Falta de costumbre?. Con eso yo la puedo ayudar bellísima Aina.
Eliminarjajajajajajajajajaja
ResponderEliminarMagistral.
¿Quién es el rubicundo al que abraza?
EliminarCojonudo este blog.
ResponderEliminarCojonudo es que se pase usted por aquí y comente.
EliminarGrandioso blog, de lo mejor que he leído últimamante. Con ese excelente toque escatológico en situaciones cotidianas y un más que evidente sentido del humor.
ResponderEliminarTe sigo sin dudarlo.
Me halaga Sir Alfred. ¿ Ha obtenido recientemente la nacionalidad kosovar? Lo digo por su apellido. No lo recordaba así.
EliminarInnumerables son la cantidad de parafilias que usted padece,,,,
ResponderEliminarUn día dedicaré un post a tan fascinante mundo.
EliminarCásese conmigo, de rodillas de lo pido.
ResponderEliminarCasémonos en Las vegas, pero tendremos que vivir en Villanueva Del Trabuco.
EliminarFe de erratas:
ResponderEliminarLas zapaterías no tienen probadores,,,,¿ O si?
ñi ñi ñi ñi, joder con los tecnicismos!
EliminarEs usted un genio.
ResponderEliminarY a juzgar por lo infeliz que parece, empiezo a sospechar que tan capullo no es. No conozco a ningún capullo que reconozca que es capullo. Besitos de los grandes.
Que comentario tan dulce,,,,No al maltrato de unicornios!!!!
EliminarUn beso.
Querido Anastasio, muy inspirado su post de hoy.
ResponderEliminarEs usted grande (y no lo digo por el tamaño del pene).
Saludos,
Por el tamaño de mi pene seguro que no,,,,
EliminarPero,,,,,PERO QUE VEN MIS OJOS¡¡¡¡
ResponderEliminarEs usted pelirojo!!!!!
Es sólo tinte amigo Monsieur Acné, para desconcertar a mis adversarios.
EliminarEste post tiene un capote que me torea.
ResponderEliminarPues ahora que lo dice, sí que le veo los cuernos,,,
EliminarPedazo de texto chaval! Que potencia¡¡¡.
ResponderEliminarGracias machote!
EliminarExcelsa caricaturización del ser gilipollas.
ResponderEliminarOvación y besos.
Béseme en la frente,,,
EliminarEl texto es una genialidad, y quien no quiera ver el arte en sus líneas debería morir a picotazos por una bandada de cuervos.
ResponderEliminarY despues vendidos los huesos para la fabricación de maracas.
Cabreado por lo de ayer,no?
EliminarGenial pero incomentable, claro, como toda la saga de sus posts. Pero es que ahí, precisamente en eso, reside todo su atractivo.
ResponderEliminarDiestra crítica.
EliminarErmm... deja las drogas o empieza a tomarlas, según sea tu caso. Y por si tomas, pásame de eso. Surrealista y divertido.Mola
ResponderEliminarNo quiero ser
Eliminarla cara oculta y fría del placer
ni alguien que controle a los demás
sonrío a sus manías y al final
me salgo con la mía
y MOLA MAZO!!!
Joder, tío. Es que queriendo o sin querer... eres un poeta.
ResponderEliminarFrustrado. Y usted un asesino.
EliminarZapatos Camper.
ResponderEliminarNo Martinelli.
EliminarPor dios que genio!!
ResponderEliminarFalete, es el genio.
Eliminarmassssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
ResponderEliminarNo me haga lo de siempre, que su bloj está plagado de priemras partes y yo mengancho a la historia y ahí me quedo con dos palmos de narices, esperando y esperando y esperando y esperando.......hasta el ocho tumbado.
Pues siga esperando amigo Javier, absurda sería una 2ª parte de tan grotesco relato.
EliminarOstras!!! No sé si me gustan más sus entradas o las respuestas a los comentarios, jajajajaja
ResponderEliminarUn petonet.
Que mal gusto tiene pues amiga Anna.
EliminarPetonets.
Einstein dijo una vez:
Eliminar"La calidad de un blog se mide por sus comentarios". Gracias.
¡CONFIRMADO!
ResponderEliminarEs usted un auténtico capullo.
Cuanta razón Su Majestad, igualito que su nieto mayor.
Eliminar¿Por qué ama usté a mauritania??????
ResponderEliminarNo estoy preparado todavía para contestar su pregunta amigo Lolo.
EliminarEs usted más poético que un atardecer en la albufera ....
ResponderEliminarCuénteme como es un atardecer en albufera!
Eliminarex-tra-or-di-na-urinario.
ResponderEliminarA sus pies.
Indasec Sr. X.
EliminarMe encanta cuando se relatan cosas que deberían ser desagradables de forma tan bella.
ResponderEliminarSi es que la belleza está en las pequeñas cosas, como el clítoris.
EliminarMierdavilloso
ResponderEliminar¿Fuma?
EliminarJajajajaja Buenísimo!
ResponderEliminarUsted sí que está buena!
EliminarEnorme relato! Su grandeza reside, entre otras cosas, en el giro argumental del final.
ResponderEliminarSiempre tendrá un plato de lentejas en mi casa.
Pues que sepa que puedo comerme una sopa de letras y cagar un argumento mejor que ese.
EliminarEnorme, enorme, me ha encantado. Y sobre todo, barato.
ResponderEliminarBarato,no. Gratis. Soy así de capullo.
EliminarA Kafka le encantaría. Y a Monterroso. Y a mí (salvando las distancias) me ha chiflado. Enhorabuena, es un relato estupendo
ResponderEliminarDisculpe mi ignorancia, pero,,,¿Quién coño es Monterroso?
EliminarLe amo y le odio a partes desiguales...
ResponderEliminarEspere que entienda su comentario y luego le respondo.
EliminarSimply amazing Mr.Prepuzio.
ResponderEliminarSi a John Lennon lo mato un fan,,, ¿Dónde estan los Fan de Justin Bieber?
EliminarAnodadada me hallo,,,,
ResponderEliminarEstoy fascinada con sus desventuras por este mundo, y no para mofarme como usted piensa, no, no; le veo más bien como un héroe, superviviente a cualquier contratiempo.
Creo que su nuevo marido no le satisface lo suficiente amiga Chary,,,¿ Me equivoco?
Eliminarjajajajaja ;) Lo que me puedo reír con sus posts...
ResponderEliminarSANDALIAS DE PLAYA?! ;)
Ya llega el veranito amigo Curro.
EliminarPor cierto, ¿su trabuco hacer honor a su nombre?
Necesitará doble plantilla de peusec,,,
ResponderEliminarY almohadillas para los testículos.
EliminarCoño!!!¡¡¡
ResponderEliminarQué mejillón tiene en la uña del dedo gordo del pie!!!¡¡¡
P.D: Publique con más frecuencia, la audiencia quiere más, y más, y más!
No es un mejillón amigo Dany. Es un sifilítico prepucio.
EliminarMis obligaciones laborales me impiden publicar con más frecuencia.
jajajja que bien escribe!
ResponderEliminarVueno, al menoz lo hintento.
EliminarCreo que me estoy enamorando perdidamente de usted.
ResponderEliminarUsted se merece un hombre. Yo no lo soy.
EliminarSin palabras,,,
ResponderEliminarWithout words,,,
Ohne Wörter,,,
Sans des mots,,,
Без слов,,,
単語なしで,,,
Χωρίς λόγια,,,
ومع عبارة,,,
Sorprendente,,,
EliminarYo también he tenido que ver dos veces la foto para darme cuenta de la realidad. Y es que a usted se le ha olvidado depilarse, ¿O no? ¿Y por qué necesita solo el zapato derecho y no el izquierdo? El zapato es chulo, y le queda a medida. Muchos besos. Anónima de Interior.
ResponderEliminarAmiga anónima de interior, cuando los varones nos tocamos, con mayor o menor brusquedad, lo hacemos normalmente con una de las extremidades superiores. En función de cual de ellas utilicemos, nuestro apéndice fálico se tuerce levemente hacia esa dirección.
Eliminar¡Vrabo!
ResponderEliminar¡Quiero más!
¿ Tiene la varicela ?
EliminarComo me he reído, por Dios!!!
ResponderEliminarViva la madre que le parió!
VIVA!
Eliminar:D MUY bueno
ResponderEliminarGracias apuesto caballero.
EliminarMaravilloso, edificante, ilustrativo, y hasta diría que estimulante.
ResponderEliminarEstimulante para los soplanucas y hembras,,,
EliminarENORME.
ResponderEliminarSe-te-va la pinza. Y perdona que no te trate de usted. Nunca sé que comentar a tus entradas. Simplemente que sepas que te leo y que me gustan mucho.
ResponderEliminarBesos.
No lo he entendido nada del relato pero me lo he pasado muy bien. Horror mugriento y hermoso
ResponderEliminarXDDDDD
ResponderEliminarhe he he he.
ResponderEliminarTremendamente divertido.
Pero tengo una duda, ¿ Como anda ahora usted?
Me ha gustado el relato que has presentado, pero tiene alguna falta de puntuacion. Basicamente son comas que, a mi modo de ver, sobran.
ResponderEliminarMajestad, no se enfade con las críticas del populacho, pues no saben lo que dicen.
ResponderEliminarSeñor Fumetas, con todos mis respetos y si me lo permite, y desde mi perspectiva como profesora de Lengua que soy, aunque no ejerza (entre otras cosas): el exceso de comas (que yo por cierto no percibo) no es una falta de ortografía ni de puntuación.
ResponderEliminarEl señor Capullo, aparte de ser un genio, tiene una escritura sobradamente correcta y una gran riqueza de léxico.
Y con todo el cariño me permito corregirle a usted, en su texto: puntuación y básicamente, palabras que usted ha utilizado, van con acento.
Qué barbaridad y qué desmesura atizarle a esa pobre dependienta así¡¡¡
ResponderEliminarBueno, bueno... Muy a favor de este post!
Apocalipsis...
ResponderEliminarjajja
Llevo horas pensando en qué comentar. Y es que la mera contemplación de su zapato me impide la coordinación cerebro-mano-teclado.
ResponderEliminarDañado neuronalmente, me despido.
Escarvando por la globocosa me encontré con este blog. Muy bueno, me partí de principio a fin.
ResponderEliminarUn saludo.