Conducía de forma temeraria con mi triciclo por la autopista en dirección a ninguna parte, aún confundido, perturbado, y llegando a la conclusión que la mejor manera de encontrar la aguja es quemando el pajar. Mi velocípedo se quedó clavado en el suelo y dejó de entenderse con sus tres ruedas, pasando a la abstracción motriz. Caminé sin rumbo escupiendo al aire por aburrimiento, por el lado izquierdo de la calzada. El viento, el peor enemigo de los flequillos, soplaba violentamente sobre el empedrado de aquella sombría autopista. Llegué a una zona de aparcamiento, con un motel, un restaurante de carretera, y un local lúgubre de perdición, lujuria y anonimato. Ideal para esos momentos. Y es que mi líbido se había disparado ante lo raro de los acontecimientos. Nunca me había prostituido pagando yo. Un tipo de apariencia ruda, probablemente de Europa del este, que se creía un marine contestando “negativo” por su walkie talkie, custodiaba la puerta de la casa de lenocinio. El portero entrecerró los ojos al mirarme para que el impacto fuera menor, intentando evitar por todos medios el contacto visual conmigo, en otra evidencia de mi siniestra fealdad. Entré en el local. Sonaba salsa, y la decoración era de un color rojizo, con luz baja y plantas de plástico por todas partes. Bajé unas escaleras como una vedette intentando disimular que era mi primera vez, y me quedé sorprendido al cruzarme con dos cortesanas que subían, muertas de risa, de la mano, con vestidos muy cortos. Me acomodaron en la barra, abducido por el espectáculo de un travesty y el olor pegajoso en el que se mezclaba el humo, el alcohol, el perfume barato y las feromonas. Los ventiladores marchaban a todo gas para paliar el calor de un local que rezumaba sexo por sus paredes pintadas de color rojo. Las cortesanas, que lucían ropas ajustadas en tejidos brillantes y tacones de vértigo, revoloteaban en torno a los depravados clientes. Empezó a sonar el “Guantanamera” y me levanté felinamente de la silla para bailar ese temazo. Había muchas, cuantiosas chicas, como tres por cada libertino varón. Todas eran preciosas; de todas las razas, de todas las complexiones, de todos los tipos. La mayoría vestían ropas de actriz porno; zapatos de plataforma transparente, mini-vestidos con escote hasta el ombligo y bikinis con faldita. En mi asiento, me dediqué a observar el panorama, a ver como funcionaba un puticlub; mirando sin pensar, pero identificando conductas. Ingenuamente intentaba encontrar a Julia Roberts entre todas aquellas meretrices. Entre chicas y música discreta, los clientes se lo pasaban en grande. El calor era agobiante, mi cuerpo dsprendía más ardor que el que corta los kebabs. Las paredes rojo chillón con el cielorraso de negro daban la sensación de claustrofobia espesa. A los costados una maquina lanzaba humo blanco. Intenté encontrar tras él, la puerta mágica de "Lluvia de Estrellas", con menesteroso éxito. Mujeres apenas vestidas con diminuta ropa interior y de cuerpo exuberante lleno de brillo meneaban sobre las cajas acústicas de los parlantes, refregando sus partes más intimas en un caño dorado. Algunos sentados en un taburete tomando whisky. Otros habían optado por los sillones de cuero del mismo color que las paredes, donde en general estaban rodeados de féminas sentadas sobre los apoya brazos. No faltaban, las que masajeaban las nucas de los invitados o las plantas de los pies, mientras permanecían arrodilladas en el suelo. Cuando entraba alguien nuevo, ellas se acercaban a él, moviéndose sinuosas y si no conseguían nada, volvían a sus quehaceres. Pero yo seguía sólo. Ninguna fulana había osado acercarse a mí. Todos parecían hipnotizados, extasiados, se abrazaban, se besaban, se tocaban, recorrían sus cuerpos con las narices y la punta de las lenguas. Hombres con mujeres, mujeres con mujeres, hombres entre si, incluso las ratas copulaban siniestramente entre ellas. Sus miradas parecían perdidas en el infinito, entregados al placer, al goce, mientras yo destrozaba mi hígado con la bazofia que me servían. Ni pagando una mujer quería acostarse conmigo. Una madame salchichera con olor a fritanga y labios exageradamente carnosos, al ver mi miserable situación, se acercó a mí y me sondeó.-“ Buenas noches caballero. Tenemos una oferta especial “polvo + cerveza” por 10 €. Si le interesa puedo presentarle a la señorita que ofrece este servicio.”-. Sin dudarlo un momento accedí a su oferta. Me presentó una muchacha rubia, de grandes ojos negros, muy bonitos, llamativos y vistosos, hermosa boca, muy sensual, lencería roja, muy chillona y llamativa. El cabello ondeado y largo, y sus senos eran dos exuberantes frutas que caían con clase sobre la boca de su estómago. -“ Hola guapo. Me acompañas a la habitación”- me susurró socarronamente. Con aires de superioridad, y ante la atenta y suspicaz mirada de los demás clientes, seguí a la bella cortesana a la habitación.
Me desnudé. Ella procedió con la misma operación. Nos sentamos en la cama, y ella me murmuró:-“ Antes de empezar te tengo que confesar una cosa. Que no tengo clítoris....”-. Ingenuamente le respondí: -“ Es igual, ponme una Heineken”-.
hilarante relato, mis respetos !!!!
ResponderEliminarEs el post con el que más me he reído!!!
Absolutamente genial!
Es como aquellas canciones de mierda que te recuerdan momentos geniales, amigo Juan José.
EliminarJa ja ja ja ja ja ja ja ja ajajajajajajajjajajajajaja muy bueno el post. Dios, hacia mucho que no me reia tanto de este tema en particular.
ResponderEliminarUsted tiene toda la pinta de roncar al reírse, apreciado anónimo.
EliminarJajaja plas plas. Qué bueno¡¡¡
ResponderEliminarCreo que lo mejor es vivir en la inopia sexual.
Tranculo Follaestero!
EliminarAlgunos triunfan hasta en un convento y otros no follan ni en Cuba.
ResponderEliminarLo de la heineken, APOTEÓSICO!
Pues yo de lo 2º ni soñarlo amiga Gusti.
EliminarHe pasado toda la lectura de esta entrada dudando interiormente entre sí sentir pena por el protagonista o reirme ante la genialidad del autor y lo escatológico de la situación.
ResponderEliminarJajajajaja, no puedo más, me meo...lo del clítoris ha sido ya para morirse!
Elija la opción que prefiera amiga belkis. Yo me declinaría por la primera,pues poco tengo de la segunda.
EliminarPerdone que hoy no comente.
ResponderEliminarSOLO APLAUDO EN PIE.
Los mosquitos mueren entre aplausos.
EliminarMil Bravos. Bravísimo. Clavado. Por Dios que bueno!
ResponderEliminarGracias amigo Txomin.
EliminarYo este artículo lo hubiera titulado 'EL BURDEL DEL HORROR'.
ResponderEliminarExtraordinario una vez más.
¿A final se tomó la Heineken ?
No amiga Maite. Bebí insecticida.
EliminarIgnoro como diablos he llegado a este blog, pero se va directo a favoritos.
ResponderEliminarEsto es absolutamente genial.
Pues si no lo sabe usted, poco le puedo ayudar yo,,,
EliminarDenle a este personaje un nobel a la ordinariedad.
ResponderEliminarB
R
I
L
L
A
N
T
E
Estaría más contento que cuando salí del oculista porque ya podía usar gafas pasta.
EliminarAhora entiendo porqué los individuos del anuncio de Heineken gritan como posesos.
ResponderEliminarSoberbio, Maestro. GRANDE.
Diestra conclusión.
EliminarEres el más grande!
ResponderEliminarAbrazo!
Sí, con 150 cm de estatura y 1,5 de apéndice fálico.
EliminarJajaja! Muy buena la historia, creo que nos a alegrado a todos un poco este día lluvioso!
ResponderEliminarSin ofender!
Beitos.
Beitos para vos ( Discúlpeme, degraciadamente no hablo galego)
EliminarEstá Vd. brillante, amigo mío. Felices empachos entrañables de ordinarieces.
ResponderEliminarPor muchos años.
EliminarMi mujer estaba y está buenísima pero prefiero leer su blog.
ResponderEliminarEsta entrada ha sido sublime. Enhorabuena Sir Prepuzio.
Pues yo prefiero a su mujer,,,
Eliminarte sales escribiendo ssisisisisiii
ResponderEliminarñoñoñoñoñoño
EliminarMi ignorancia no me permite hacer un comentario constructivo pues no sé qué es un clítoris.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues no sabe lo que se pierde amigo Wolffio.
EliminarMe había pasado un par de veces por su blog, y aunque está muy bien escrito, no había encontrado nada que me llamase especialmente la atención. Puede que fuese por la temática, por diferencias en nuestros gustos, o quien sabe, pero este post me ha encantado. Le aplaudo.
ResponderEliminarHágalo efusivamente cantando una ranchera de Bertín Osborne.
EliminarMui biene.
ResponderEliminarEs usted un extraterrestre.
Me he tronchado con lo del clítoris. Siga así.
No lo soy amigo Esteban, pero sí que tomo licor de hierbas con extraterrestres.
EliminarSeñor Prepuzio seguro que fue un complot judio-masonico fijo!
ResponderEliminarNo descarto esa opción,,,
EliminarCasi muero de la risa con el último párrafo. Las lágrimas caen sin control por mis ojos. Impresionante documento. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarSi tiene que morirse hágalo frente a un espejo. Es una experiencia fascinante.
EliminarSr. Prepuzio, el travesty es usted, a que si?
ResponderEliminarNo lo soy. Tal vez algún día,,,
EliminarMaestro de lo vulgar, ha contado innumerables historias que pueden llegar a parecer irreales, pero con la de hoy ha roto usted el molde. Ahora estoy seguro de que por fin ha contado un episodio real de su vida.
ResponderEliminarNo es usted precisamente pues un gourmet literario, amigo Nacho.
EliminarGENIAL;GENIAL!!!!!.
ResponderEliminarUN AUTENTICO CAPULLOOOOOOOO
Sure.
Eliminarque grande
ResponderEliminar¿El qué?
Eliminarel ingenio..........
EliminarNo le imagino... lo intento pero no puedo.
ResponderEliminarMeándome de risa.
Imagínese bailando tocando un instrumento imaginario.
EliminarCiertamente Don Anastasio es usted un incomprendido como todos los genios que en el mundo han sido.No sabe ud. lo que yo hubiera pagado por ver el bochornoso espectáculo.
ResponderEliminarKisess
Para verme desnudo, no es necesario que pague amiga Sheila. Le puedo hacer una demostración cuando ud. lo quiera.
EliminarHeineken para todo el mundo¡¡¡¡
ResponderEliminarJAJAJAJAJAJAJAJA
MAGISTRAL.
Invito yo!!!
EliminarMe estoy go too p´abajo de la risa!!! Lo de la heineken, quedará para la posteridad Sr. Capullo.
ResponderEliminarYa sabe que le quiero.
Y yo.
EliminarJajaja lo que me ha hecho reir, sí, esa burda ironía me gusta.
ResponderEliminarQue no deaciga, por dios!!!
Un saludo.
Eso, eso!!!!
EliminarPor favor, no se cure, entradas como esta me preocupan, tanta lucidez...
ResponderEliminarSombrerazo.
Ya sabe usted buen amigo Mr. Triky, que lo mío es incurable.
EliminarHumor negro o eso he creído entender con el final frustrado de la historia: excelente receta para tiempos duros.
ResponderEliminarNo llegó a ser humor negro,,,por suerte.
EliminarAnda dígame que me quiere aunque sea mentira...;)
ResponderEliminarBesos.
"que me quiere aunque sea mentira...;)"
EliminarGenial, lo mejor que me podía pasar para acabar el día. Ya tengo una sonrisilla en la boca pa todo la noche. Estoy por imprimirlo y llevármelo en el bolsillo para releerlo mientras el Milan le mete tres al FCB, prometido :D
ResponderEliminarAmigo Impulsivo X. Guarde el relato para después del partido. Tal vez le ayude a digerir el 4-2 que el mejor equipo del mundo endosará a los italianos.
EliminarPues va usted a ser todo un vidente de verdad. Minuto 87 de partido y van 3-1 a favor del mejor equipo del mundo.
EliminarLo has clavado, vive Dios.
ResponderEliminarSí existe. Chateo con él en facebook.
EliminarMe ha dejado usted con la boca abierta y el culo más apretado que la faja de Marujita Diaz.
ResponderEliminarNo me extraña,,,
Eliminar¡Diosantísimo-delatrinidá!
ResponderEliminarWUENÍSSSSSSIMO!!!!!!!!!!
Amiga Ultra Tumba, que estamos en Semana Santa,,,
EliminarJajajajajajaja, este tio es un crack
ResponderEliminarEso me gustaría a mí,,,
EliminarCÓMO ME HE REIDO!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarQue me meooooo, jejejeje
Cuidado no vaya a mancharse el vestido de novia.
EliminarDeje de comer patatas del IKEA inmediatamente!!!!
ResponderEliminarNo puedo amigo Andrés. Lo he intentado con estériles resultados.
Eliminargran gran gran post!!
ResponderEliminarbesets, si m'ho pemets.
I tant que si. Gracies Olga.
EliminarPero qué demonios¡¡¡!!!!
ResponderEliminar¿Si es la Obregón con 30 años,no?
Eso me pareció a mí,,,
EliminarEste post es la hostia. ¡Si me ha gustado...!
ResponderEliminarMe alegra que le haya gustado.
EliminarQue alguien de la RAE me diga si ESTO no es arte joder...
ResponderEliminarSe ha superado, maestro.
Usted si que tiene arte al discutir sin tener ni idea de lo que se está hablando.
Eliminar¿Que nunca se haya prostituido pagando usted significa que alguien ha pagado por tener sexo con usted? ¿Y finalmente tuvo sexo o no con la transexual? Es curiosidad, pura curiosidad. Un beso.
ResponderEliminarAnónima de interior.
No. Es precisamente lo contrario amiga Anónima de interior.
EliminarNo tuve sexo, huí más acojonado que el urólogo de King Kong.
¡No sabe usted como me alegra saberlo!. Es usted más legal de lo que puede parecer.Anónima de interior
EliminarAlegal tal vez sería el término correcto, amiga Anónima de interior.
EliminarCreo que es la primera vez que ando por acà, y me quedo helada.
ResponderEliminarGenial.
Se me ocurre una alternativa para paliar ese frío,,,
EliminarTengo una botella de cava esperando.... En sus manos está que se abra;)
ResponderEliminarUnos besos
Vaya abriéndola que voy estoy llegando.
Eliminar¡Santodios q peaaazo de megapost! ;)
ResponderEliminarMuchas gracias pequeño y tostado Gary.
EliminarNo he entendido nada, pero me encanta leerlo, como siempre..
ResponderEliminar¿Es Usted rubio?
EliminarGenial el texto. Y con lo de 'La Heineken", me he muerto de la risa. Las lágrimas, por suerte, no me han dejado reflexionar mucho sobre mis pecados.
ResponderEliminarNo reflexione amiga Elvira, fornique.
EliminarBueno, nadie es perfecto.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Bienvenida a este absurdo blog amiga Ángela.
Eliminar-Ave María Purísima
ResponderEliminar-sin pecado sea concebida.
-Padre me acuso de haber leído cosas prohibidas
-¡¡¡¡¡Al infierno!!!!
Voy a entrar en el infierno a hombros y por la puerta grande.
Eliminar¡El infierno va a colgar el cartel de "Completo"! Anónima de interior.
ResponderEliminarEntre yo y tod@s ustedes, seguro.
EliminarJoder! Excelso!
ResponderEliminarMe quito el sombrero ante semejante ironía. Decididamente la vanidad es la suerte de los imbéciles que hacen cola para ver cómo cotiza su éxito.Y usted no es un imbécil.
Anda equivocado amigo Bigotes. Yo soy más imbécil que el que traduce los títulos de las películas.
EliminarPor favor, qué genialidad!!!! Lo del clítoris es absolutamente sublime. Esto se lo enseño a mi jefe.
ResponderEliminarHágalo y cuando llegue a casa espere al cartero con el burofax de su empresa.
EliminarVaya a cenar con Punset.
ResponderEliminarCon Punset juego a la petanca.
EliminarHoy no voy a darle a la traviesa imaginación. Cojo sus palabras, tal cual, y me ciño al guión: Es usted es un genio.
ResponderEliminarDiscrepo. Soy un auténtico capullo, como bien demuestra este post.
EliminarBuenísimo.
ResponderEliminarUsted sí está buena.
EliminarEs usted de los grandes.
ResponderEliminarNo. Yo soy uno de aquellos tipos que a primera vista parece subnormal y luego más tarde lo confirma.
EliminarLe dije que volvería. Y lo quería hacer con una acérrima crítica a su blog, pero tras leer su último artículo, sólo me queda aplaudir con las orejas.
ResponderEliminarBRAVO, pese a que me cueste reconocerlo.
Gracias Dumbo.
EliminarMagnífico Her Prepuzio.
ResponderEliminarCulminante, frenético, delirante, COLOSAL.
Se agradece el halago amigo Salva.
EliminarMuy buena la pagina, le felicito!!
ResponderEliminargenial el descubrimiento de este sitio, nunca es mucho.me lo pienso leer todo.
Colombia necesita de su ayuda
Corea del Norte por ahora es mi prioridad.Pero lo apunto en mi debe.
EliminarHe oído por ahí que le quieren fichar los de Intereconomía...¿ hay algo de cierto en este rumor?
ResponderEliminarMe han sondeado para incorporarme como limpiachicles. pero todavía no lo he decidido. Se lo haré saber cuando tome la decisión amigo Demián.
EliminarExtraordinaria aportación la suya. Escribo estas palabras llorando de risa.
ResponderEliminarPero, confiese, ¿Accedió finalmente a la oferta?
No. Me faltó testiculina.
Eliminarcurioso blog,
ResponderEliminarel descubrirlo ha sido el mejor momento del día... por ahora!!
Me encanta tu estilo.
Que día más miserable habrá tenido apreciado/a anónimo.
EliminarJajajajajaja " Es igual, ponme una Heineken”.
ResponderEliminarAntológico.
Eso no se atreve a decírmelo en la cama.
EliminarJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
ResponderEliminarPLAS, PLAS, PLAS!
SOBERBIO!
¿Cuando me mostrará su foto de frente amiga Arien?
EliminarHe de decir, sin ánimo de ofenderle, que peores cosas se ha tirado usted. Y no es necesario ir a posts muy lejanos para corroborarlo.
ResponderEliminarCierto bellísima Aina, pero todas ellas eran con sus defectos y virtudes, mujeres.
EliminarA mi también me gusta mucho el humor negro (Eddie Murphy, Bill Cosby, Whoopy Goldberg...)
ResponderEliminarGenial el post.
¿Es usted racista amigo Dani?
EliminarJa,ja,ja,ja, me gustó mucho. La pasé re-bien leyendo este escrito. Humor vulgar...ironía.. y sobretodo ingenio. Muy bueno.
ResponderEliminarGracias amiga. Me recuerda usted a la decrépita Stephanie de Lazy Town.
EliminarAsí que fue ud el que se largó corriendo medio desnudo del burdel?¿
ResponderEliminarEse era yo.
EliminarÁAAAÁAAAÁÀAÀAÀAAÂÂÂH!!!
ResponderEliminar¿Está en el dentista amiga Gaya?
EliminarQuerido Anastasio, aún soy fértil. Puedo ser la madre de su primer vástago. No haga ascos.
ResponderEliminarNo le voy hacer ascos, se lo aseguro amiga Geeks.
Eliminarwouooo.
ResponderEliminar:) ;)
JODER, QUÉ GENIO.
wouooo dice su perrito.
EliminarQué dura es la vida de los salidos!
ResponderEliminar(nos van a tener que hacer un monumento)
Es el precio que debemos pagar los que lo entendemos todo en términos freudianos.
EliminarOstia, vaya zapatazo de final¡¡¡. Bravo.
ResponderEliminarUsted me acojona.
EliminarJAJAJAJAme parto¡¡¡¡
ResponderEliminarLa locura no tiene cura pero sí tratamiento paliativo que estoy dispuesto a proporcionarle para aliviar su dolencia que, segurametne, a más de uno sacará de quicio. Salud. Jojojo.
Dicen que tatuarse una aceituna en el tobillo alivia estas dolencias mentales.
EliminarJajajaja, por favor, que le den el Oscar ya por ese blog que tiene. Lo del clítoris es épico, antológico, perdurará...
ResponderEliminarPor los siglos de los siglos, Amén.
EliminarTengo a toda la oficina a carcajadas.
ResponderEliminarWuah! Se ha superado Mr. Prepuzio
Están muy aburridos en su oficina ¿eh? Jodida crisis.
EliminarCreo que usté es Sánchez-Dragó disfrazado de Spiderman.
ResponderEliminarNo. Soy un velociraptor.
Eliminarjajajajajajajajajajajajajaaja! por Dios..he muerto de la risa con la Heineken..
ResponderEliminarA mi me hace gracia sus carnosos labios.
EliminarAhora también gay? Ya nadie está a salvo!
ResponderEliminarNo no soy gay. ¿Lo es usted?
Eliminardios mío que bueno, como me he reído.
ResponderEliminarDios no existe, amiga Pillina.
EliminarSon ustedes una horda de sifilíticos mentales!
ResponderEliminarUsted es el claro ejemplo amigo Lolo.
EliminarEl comentar desde la resaca, aliento espeso, recrujir estomacal y ojos ensangrentados hace que no entienda nada de este post.
ResponderEliminarAsí que diré lo dicho aquí: Muy bueno!
Usted a lo suyo amigo Dj Aden,,,revise su cuerpo por si encuentra moratones anónimos.
EliminarSu final,,,, ¡zas! llegó el toque macabro dejándome morcillón y su posterior flaccidez inmediata
ResponderEliminarPues si le cuento como me dejó a mí,,,,
EliminarLa culpa la tienen las drogas de diseño, cada vez son más potentes .. la humanidad se hunde con caballeros como usted.
ResponderEliminarNo tomo drogas amigo Anónimo, sólo me suministro enemas rectales.
EliminarIm-presionante. El mejor artículo en la historia del blog. Es más, la mejor entrada que he leido en un blog desde hace dias. Sólo un fallo: es demasiado corta. Quiero más. Quiero una saga de veintitres novelas sobre el tema en cüestion.
ResponderEliminarLos comentarios y comentaristas aún engrandecen más, si cabe, la genialidad. Suscribo a Twiteo: sr. Prepuzio, queremos más, mucho más. Y escriba usted una novela, creo que tiene el éxito asegurado
EliminarIntentaré conseguir 22.
Eliminar¿Es usted consciente de su condición de auténtico capullo?
ResponderEliminarDe verdad que no entiendo como siendo el factor escatológico algo tan cotidiano puede generar tanto cachondeo. No falla nunca, y yo soy el primero que se descojona.
ResponderEliminarGenial entrada. ¡Qué panzá de reír!
ResponderEliminarSu intelecto es tan preclaro y tan avanzado a nuestro tiempo que el resto del mundo le ve como un fracasado.
ResponderEliminarUn besazo Señor Anastasio.
Hizo bien en salir huyendo de aquel burdel. En semana santa no se puede comer carne.
ResponderEliminarMagnífica entrada.
Oh por Zeus, uno no sabe nunca cuánto echa de menos estas entradas hasta que escribe una de nuevo.
ResponderEliminarSublime, sublime !
Nos vemos en el infierno !
Ostias!! es una joya!!
ResponderEliminarDan ganas de bailar sin parar sobre el escroto de su autor.
Entradas así alegran la vida ajena. Gracias. He visto la luz.
XDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
ResponderEliminar¡Glorioso!
Enhorabuena por esta genial nueva sección que de seguro enriquecerá nuestro acervo, desenvolvimiento para la vida, así como conocimiento sociológico… cual sanchopanzas conocedores del refranero del siglo XXI.
ResponderEliminarCurro Jim´nez.
Saludos desde la hoy pluviosa Valencia, emocionado y lloroso (de la panzada a reir que me he pegado con su post). Si pudiera te cantaba una Jota Sanvicentera.
ResponderEliminarxDD
ResponderEliminarme lo imprimo ahora mijmitooo! juas juas juas
¿qué clase de pacharán se bebe ud Don Prepuzio? a saber xDDD
ResponderEliminarUna puta maravilla. Qué hinchón de reír, niño…
ResponderEliminarSimplemente brutal. Me vuelvo a descubrir ante vos, oh Gran Anastasio!
ResponderEliminarSaludos.
Me meoooooo toaaaaaaaa como dirían los de Martes y 13.
ResponderEliminarMuy, pero que muy bueno esto blog.
Jajajajajajajajajaja Qué grande!
ResponderEliminarJoder pues no está nada mal la pájara,,,
ResponderEliminarNos guztaría de una puñetera bez que nos mostrara su ( zegún usted ) orrendo roztro. záquese ya eza careta de spiderman!
ResponderEliminarOtra vez más se ha sacado de la manga un post tan vulgar como divertido, le felicito por su habilidad para remover conciencias, maesetro Anastasio.
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