El tipo de papel a utilizar no tiene por que ser especial, podemos utilizar cualquier tipo de cuartilla, cartulina, lámina o papiro, siendo no obstante, especialmente complejo, practicar esta técnica con papel higiénico.
Es inverosímil observar la cantidad de estúpidas formas y figuras que se pueden modelar partiendo de un solo cuadrilátero de papel. Una de las principales reglas de la papiroflexia es: “No cortado, no pintado, no cuadriculado, sólo plegado”.
Los expertos afirman que si un niño comienza esta actividad manual a edad temprana, obtendrá una mayor madurez cerebral, lo que favorecerá su desarrollo intelectual y beneficiará su tránsito intestinal.
Esta adictiva disciplina favorece la concentración y el desarrollo de la coordinación visomotora, que, por medio del proceso de plegado, se facilita la visualización de cuerpos geométricos y la comprensión de conceptos como diagonal, vértice, mediana, bisectriz, logaritmos, secuencias algebraicas y mensajes satánicos. Así pues la papiroflexia tiene una relación directa con las matemáticas. Según la filosofía oriental 'doblar papel' aporta calma y paciencia, con lo que es un remedio efectivo para el estrés.
Complejas estructuras dodecaédricas, bellos galeones, feroces cóndores andinos o elegantes pajaritas son algunas intrépidas figuras que podemos obtener con esta económica y desestresante disciplina.
Hoy vamos a aprender una de sus prácticas utilidades: como liar un canuto. ( El ingrediente utilizado para dicho cigarrillo se deja al libre albedrío del lector):
1.- Poner el tabaco o sustancia deseada. Distribuir con destreza el tabaco o producto deseado a lo largo del papel.
2.- Prensado. Una vez tenemos todo el tabaco en el papelito, hay que prensarlo balanceando el papel, como si hiciéramos el gesto de dinero con los dedos. Se aconseja practicar este paso delante de un espejo. Aplicamos cierta presión con las yemas sobre el tabaco o sustancia deseada para que tome la mejor forma cilíndrica posible. Abstenerse en este paso quienes sufran temblores en la manos.
3.- Filtro ( Opcional ). Cuando el tabaco está lo suficientemente aplastado hay que introducir el filtro sin abrir el papel. Los ‘muy hombres’, suelen omitir este paso.
4.- Igualado. Balancearemos el papel hacia alante y hacía atrás repetidamente para que el contenido se acomode al filtro. En este delicado proceso puede caer algo de tabaco por la izquierda, es normal. En épocas de austeridad como la actual, es sumamente importante recuperar estos residuos.
5.- Pinzado. Auxiliados con los dedos pulgar y corazón de ambas manos, procedemos al pinzado del pitillo. Es frecuente en quienes tengan dedos de pocero, que esta secuencia no salga a la primera. Una vez ha quedado bien sujetado y observamos que no hay dobleces, seguimos enrollando el cigarro en el papel hasta que sólo queda el pegamento suelto.
6.- Pegado. Sin soltar el cigarro, mojamos el pegamento con la lengua, con movimientos lascivos, desde el filtro hacia fuera.
7.- Y a fumar!
Muy bueno este post Sr. Prepuzio!!!!
ResponderEliminarja ja ja ja! Buenísimo!
ResponderEliminarcullons ¡¡¡¡¡
ResponderEliminarUd. está muy mal de la cabeza,,,,
ResponderEliminarMe he partido!!!
ResponderEliminarNo había caído en que liarse un pitillo forma parte de la papiroflexia.
ResponderEliminarMi querido amigo, según lo escrito, los funcionarios deben de tener el cerebro muy desarrollado, por lo que habría que reciclarlos y dedicarlos a la investigación, campo en el que podemos ser punteros.
ResponderEliminarPor mi parte, ahora comprendo por qué nunca fui capaz de liar un canuto. Jamás pude hacer una pajarita con un papiro, de hecho en mi casa no teníamos papiros.
Gracias por sus consejos, y un saludo.
Qué animal es usted!!!!!
ResponderEliminarYo ni siquiera conseguí hacer un avioncito de papel.
ResponderEliminarJajajajaja me he reido un rato y eso es de agradecer...GRACIAS! :)
ResponderEliminarMenudo pegote para enseñarnos a liar,jajajajajajja
ResponderEliminarSe nota ke el señor prepucio es un fumeta....
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