viernes, 20 de abril de 2012

EL DENTISTA

Era la tercera vez que  anulaba mi  cita con el dentista; y no precisamente porque me hubiera dejado de molestar una de las muelas del juicio. Tampoco intervinieron en ello un viaje de trabajo imprevisto, tener que aparear los calcetines o una inflamación testicular. Eran las tres excusas, que aunque nadie me preguntó, me apresuré a soltar para lavar mi sucia conciencia. Desde la última vez en que me atendió un decrépito dentista que me dejó las encías como para comer clítoris de ancianas o masticar almendras, lo que tengo es miedo, mucho miedo, auténtico pavor. Me horroriza, me espanta, me atormenta la idea de sentarme en el sillón y abrir la boca para intoxicar la consulta con mi atroz halitosis. No es un tópico. La odontofobia existe. El simple olor característico de la consulta, la espera tumbado en el sillón, el ruido del torno, la máscara del odontólogo, me pone, literalmente, de los nervios. Es superior a mis fuerzas. Una vez allí, siento pánico, tiemblo, sudo, eructo y sufro de incontinencia urinaria.
Mi buen amigo Evaristo me contó que el mundo de la odontología  estaba dando un giro copernicano. Me facilitó el nombre y teléfono de su dentista, que al parecer, utilizaba una técnica innovadora e indolora. Fuera olores desagradables. Un facultativo que por lo  visto contaba  con DVD para distraer a los pacientes, música relajante, sin hombres y mujeres de batas blancas y con nuevas técnicas que impedían sentir la más mínima molestia. Regentaba un ‘clínica dental spa’. En ella, todo invitaba a la relajación, a espantar el miedo. Aromaterapia, masajes en los pies mientras el dentista trabaja con los dientes del paciente, ofrecía acupuntura antes del tratamiento, e  incluso ofrendaba masajes escrotales por parte de la enfermera.
Decidí probar, mayormente por lo del masaje testicular. El pasado miércoles, estuve en el dentista. El odontólogo era un dantesco hombrecillo delgado, de pelo blanco, cara élfica y frondosas cejas tal bufanda de lana, que recibía a sus pacientes con un apretón de manos, utilizando la izquierda para romper el protocolo. La sala de espera estaba abarrotada de gente, y yo, no paraba de mirar el reloj cada cinco minutos. Estaba más nervioso que Marco en ‘Sorpresa Sorpresa’. No sabía en qué consistiría aquella innovadora técnica dental. Ya había ojeado todas las revistas que, de forma desordenada, se ubicaban encima de una pequeña mesa esquinera. Caras largas y silencio total en el lugar, roto por alguna que otra tos tuberculósica de alguno de los que allí esperaban. Una hora de retraso y yo era la última cita del día. 
El tiempo iba pasando y la sala de espera vaciándose paulatinamente hasta quedarme a solas con una mujer obesa de unos cuarenta años que me miraba de vez en cuando mientras leía su revista de macramé. Era algo diminuta de estatura, de pelo castaño, ojos color miel, ropa de campesina y un aire en conjunto deleznable. Era una mujer grasienta, deforme y vomitiva. Estaba convencido que llevaba la ropa interior al revés para que durara otro mes. Hirsuta de pies a cabeza, parecía un perfecto híbrido entre humano y orangután. Sufría un severo cuadro de halitosis, pues una bocanada de hedor a pescado podrido y perro muerto llegó a mí cuando bostezó.  El anillo de oro que tenía en su mano derecha era prueba inequívoca de su estado civil. Deduje que estaría casada con algún decrépito individuo que perdió el sentido del olfato. Me imaginaba a su marido llorando cuando la besaba. De cuando en cuando me guiñaba un ojo y movía la lengua a 500 revoluciones por minuto. El aburrimiento que me invadía, empezó a fantasear con aquella pueblerina con las cejas pintadas en mitad de la frente. Me la imaginé dejando su revista a un lado, acercándose torpemente hacia mí y besando mi boca de forma inesperada, poniéndose a mi lado y buscando un resquicio en mis pantalones para introducir una mano con dedos tal salchichas la vino en mi sexo, que empezaba a calentarse por la presencia de la extremidad aún desconocida. Sentí la mano como si fuera real, inconscientemente, mis piernas se abrieron físicamente al deseo mientras seguía imaginando escenas morbosas con mi compañera de sala. Mi perturbada mente iba rápido cavilando cada uno de los movimientos de la escena. Imaginé las manos de la obesa recorriendo mi piel. La vi sentada sobre mí, aplastándome el pubis, cabalgando apresuradamente antes de que la enfermera me avisara de que entrara en la consulta. Y fue precisamente eso lo que me despertó de mis pensamientos. En aquel momento, la señora de mis horribles ensoñaciones desapareció tras la puerta y me quedé completamente solo en la sala. Me dirigí al aseo y perdí  inmediatamente la dignidad enjuagándome la boca.
Llegó mi turno. A partir del apretón de manos, lo demás creí que sería predecible: sentarme en la silla, abrir la boca y dejar trabajar al miserable matasanos, con esa cara de gilipollas que a uno se le queda cuando está ahí boquiabierto, decúbito supino sobre ese pseudo sillón, instrumental variado entrando y saliendo de la cavidad bucal.
Pero no sucedió así. El dentista, al contemplar mi cara de pánico, quiso hacerme una demostración de su innovadora técnica...
Huí horrorizado de la consulta al comprobar cómo iba a extraerme la pieza dental. Las jodidas muelas del juicio podrían esperar.


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204 comentarios :

  1. Absolutamente, anotlógicamente, gigantescamente GENIAL.

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  2. Grande Post. Antológica la historia de la visita al dentista.

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  3. oderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoder (con voz rápida y asfixiante), muero de risa.

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  4. ¿ El odontólogo, por casualidad, no se llamaría Rocco Siffredi??
    Un beso y gracias por arrancarme unas buenas carcajadas.

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  5. ¡¡¡Es irremediable... no pUEDO controlame!!!
    ESTO NO ES SPAM... EXQUISITO.

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  6. Creo que debería visitar a ese dentista,,,
    Muaks.

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  7. He leer su relato, estimado Her Prepuzio, ha obtenido de mí algarabía, júbilo y un descontrolado intento de realizar de nuevo un golpe de estado.

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  8. Eres un pupas y un miedica, Anastasio! Un pollazo así no te va a sacar una muela; como mucho, te reventaría una espinilla.
    A mí sí que me mola ese dentista!. Mira, si está como en el vídeo, primero le haría una buena felación, luego le haría sentar en el sillón para los pacientes y yo cabalgaría sobre él. Después me sentaría en el sillón, abriría la boca, le cogería fuertemente de los huevos y le diría: "Ninguno de los dos vamos a hacernos daño, verdad?"

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    1. Jolín qué atrevida belkis!

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    2. ¡Qué atrevida, y qué boca tan grande tienes Belkis !Anónima de interior.

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    3. Anónima de interior.....de momento, me lo tomaré como un halago

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    4. Interesante propuesta la suya amiga belkis, sumamente interesante,,,,

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    5. Belkis, lo de la boca no ha sido con ánimo de ofender. Lo decía porque has dicho de hacer una felación al dentista, y el dentista en cuestión tiene un instrumento muy grande. Era una observación sin más.

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  9. A ver si me puede dar la dirección del Dr., Sr. Prepuzio. Tengo los dientes perfectos pero tal vez me pueda curar otra cosa.

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    1. No hace falta. La otra cosa se la puedo paliar yo. Y gratis.

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  10. Mi dentista me hace eso, y de doy tal somanta de collejas que acaba hablando en vietnamita.
    La entrada, como siempre, genial.

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  11. Pues yo sería más romántico con la enfermera,,,,

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  12. Es-pec-ta-cu-lar.
    Artículo del Siglo. ¡No, del milenio! ¡No, de todos los tiempos!

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  13. Tan voluntarioso como voluminoso artículo, sí señor. Me quito el sombrero, el pelo y hasta la cabeza si es preciso.

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  14. Jajajajaja Excelente post, enhorabuena! Y además, justo a tiempo, cuando la sanidad anuncia recortes.

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  15. Mis más sinceras y honestas felicitaciones súbdito Anastasio.! Realmente nos hallamos ante un post que lleva la epicidad a un nuevo nivel de existencia.
    Y pido perdón. me he equivocado.

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    1. Le perdonamos, pero intuyo que a este paso, su querido hijo solo reinará la isla de El Perjil.

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  16. Un passing shot digno del mismísimo Björn Borg¡¡¡¡

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  17. De nuevo, enhorabuena por el post EPICO!!!! (notesé las cuatro exclamaciones, reservadas para lo más jrande) ;-)

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  18. Me acabo de leer todo el post (y estando en el trabajo ^^'') y solo digo que me ha parecido genial. Felicidades.

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    1. Tiene su pc pinchado por el dpto. de informática amiga Nandy. Vigile.

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  19. VRABO!!!!¡¡¡
    Torbe-Torrentesca entrada.

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  20. No se vacunes, ya la ha pillado.

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  21. Para Ayda (es que no me deja Responder, la página ésta):
    Ayda, con lo caro que es el dentista y el miedo que da, al menos sacar algo de provecho.
    De todos modos....no deja de ser todo literatura, o sea, ficción.

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    1. No es ficción queridas amigas. Mis relatos están basados en hechos reales.

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    2. No lo pongo en duda, sr. Prepuzio. Me refería sólo a mis palabras o comentarios.

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  22. Pues a mi me ha roto de risa lo de la mujer´con halitosis de la consulta cuyo marido había perdido el olfato y lloraba cuando la besaba...
    Fantástico.

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  23. Una vez más, un documento cargado de brillante odinariez.
    Me bajo a hacer la primitiva...

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  24. !!QUE VIVAN LOS DENTISTAS¡¡

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  25. plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas

    espectacular! no tengo palabras, estoy llorando de la risa...

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    1. Los chicos no lloran tienen que pelear.
      Venga cantemos tod@s¡¡¡:
      Es mi vida, no quiero cambiar
      los chicos no lloran solo pueden soñar
      es mi vida no quiero cambiar
      los chicos no lloran tienen que pelear
      es mi vida ah! Es mi vida ah!

      Con un canalla como yo
      un oficial con mucha artilleria
      hey!Qué seria de ti?
      Hey! Qué dices encanto?
      Y otro pecado capital....qué serà?
      Y bailaremos eh?
      Y baileremos eh eh eh.....?

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  26. Magnifico post, y magnifico material grafico. De donde ha salido ese hombre disfrazado de Spiderman, por dios!
    La depravacion de la gente en internet no tiene limites?

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  27. MECAGOENDIEZ !!!
    Genial. Y un poco doloroso.

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  28. Toda la entrada tremenda, y lo mejor las ganas de violencia irracional y gratuita que despierta ese dentista. ¡¡la leche!!.

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  29. Solo deciros, ole ole y ole!
    Buenísimo el final

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    1. Permítame una pregunta...
      Es evidente que usted es alopécico, pero puesto que en su foto apenas puedo apreciarlos, ¿ es usted calvo con melena?

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  30. Jajajajajajajajajaja
    Como me estoy riendo. No sé si usted busca el material gráfico o es éste el que le busca a usted.

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  31. Inestimable aportación escatológica, querido Anastasio.

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    1. No creo que el vocablo 'inestimable' sea el adecuado para tan soez entrada.

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  32. Un post estupendo que me arrastra a la memoria consciente recuerdos que mantenía enjaulados y amordazados en mi inconsciente.
    Al cura de mi pueblo me refiero.

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  33. jajajajaja, buenísimo...
    El gif final... impresionante, la ciruelita para un post genial.
    Un abrazo.

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  34. Prefiero no imaginarme como realiza los empastes.........

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  35. Yo me apunto también!!!!!
    Queremos cena, queremos cena, queremos cena!!!!

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  36. Aplaudo el humor que se pierde siempre entre la ordinariez y el buen redactado. Siempre rescataré a un capullo.

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  37. A veces se me olvida que es usted un capullo, y es entonces cuando veo muertos. No intente entender la frase, no tiene sentido, al menos conscientemente.
    Un saludito.

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    1. Tómese un vasito de leche y váyase a la cama.
      Le noto cansado amigo Heartit.

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  38. Bueno, bueno, bueno...que post más divertido
    Anda que si le llega a sacar las muelas con este método...
    Ayns...
    Si es que es ud. demasiado para mí. No words.

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    1. No tiene suficientes pruebas para afirmar lo arriba comentado.

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  39. Páseme una calada de lo que fuma.
    SOBERBIO¡¡¡

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  40. A veces me pregunto perpleja si realmente es usted un personaje del blog o piensa y le ocurren esas cosas. No sé, me pregunto qué hay detrás de esa ridícula careta.

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  41. Joder que me cago de la risa....XDDDDDDDDDDDDDDDDD Coño111 pero tu de donde has salido?:)

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  42. Seguro que el dentista es de la seguridad social. Hay que reducir costes.
    Me encantó el post.
    Un beso.

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    1. Si al final utilizarán Licor 43 como anestesia.
      Un abrazo amiga Maite.

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  43. Madre mia, he llegado a tu blog por casualidad y llevo leyendo más de una hora tus artículos, y es que no puedo evitarlo, me he reído un montón.

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  44. Joder!!!! Ese dentista es un rompecabezas!!!! jajajajaja

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  45. Me encanta como escribe!!
    Desventuras son las cosas que le pasan cDon Anastasio, quiero pasar un día con usted y vivir todas esas experiencias jajaja
    Muaks
    Dulzura♥

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    1. Una semana con usted pasaría en una playa nudista jovencita Dulzura.

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  46. Hace tiempo que no sabemos de Jacinta.
    ¿Está bien?

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    1. Promocionando su jodido libro la muy cabrona. Ando como usted, canino.

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  47. Una gran y divertida historia como siempre caballero :)
    Algún dia me encantaria conocerle :)
    Tiene que ser divertido.
    Besotes.

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  48. jajajaja!!!!! Genial!!!!! No puedo parar de reír!!!!

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  49. He aquí la razón del pánico que tienen los hombres a la hora de ir al dentista.
    Petonets.

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  50. Jajajajajaja hartón, empacho de risa!

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  51. "Que tipo de anestesia quiere, con mucho dolor o con poco alivio?"
    Fdo: Su dentista

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  52. A mí también me da cosilla el torno de los dentistas, pero acabo de cabiar de dentista, y este me pone un montón. Si no fuera por lo caras que me salen las consultas...
    Felicidades por el post. Un abrazo. Anónima de interior.

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    1. Usted me pone mucho más, aunque no saque la careta de Spiderman. Su inteligencia y su sentido del humor me seducen. A sus pies.Anónima de interior.

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  53. Esto es el principio de una novela. Por favor.. Está en forma.

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  54. Yo también fui a ese dentista, no tiene porque avergonzarse. Juntos lo superaremos.

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  55. Siempre lo supe. Yo no soy racista, pero el dentista era negro.

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  56. ¿¿Mi mandíbula tiene un límite sabe Sr, Dentista??
    Este dentista era de los que daba piruleta?

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  57. Le voy a denunciar a la guardia urbana por impedirme dormir esta noche devorando sus geniales posts

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  58. Comparto con usted ese miedo irracional y exagerado a la silla del dentista pero si tuviera que ir a suyo, creo que se me acabaría el trauma, me sobra hasta la música de fondo.

    De todos modos, comentar que ese hombre enjuto del que usted habla, está muy desproporcionado.

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    1. Si es eso lo que le gusta del dentista, me pongo una prótesis alargatoria y le empasto un par de muelas bellísima Aina.

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  59. Carajo, que buen blog!!
    Saludos desde Argentina.

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    1. Me alegra ese saludo desde el otro lado del charco. Saludos para vos.

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  60. Joder no sé como se lo monta, pero es la excepción de la regla: menos escribe, más lo borda. Qué bicho. A ver si un día me pasa la fórmula..

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    1. Masturbarse viendo girar el microondas es un excelente método para la inspiración literaria.

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  61. Gran narración de los hechos y mejor final. ¡Enhorabuena!

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  62. Enhorabuena por esta avalancha de visitantes.
    En cuanto al post, sólo puedo reír.

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  63. Genial entrada. ¡Qué panzá de reír!

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  64. Ay¡¡ si no fuera por estos ratos de idílico romanticismo escatológico...que rato¡¡ hacía tiempo que no me reía tanto.

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  65. Si me muero diganle a ese dentista: QUE TE DEN POR CULO¡¡¡

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  66. Mejor espero a que se me caigan los dientes,,,,

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  67. Siempre está bien hacer un alto en el camino del estudio de la nuevas tecnologías aplicadas a la educación(¡toma!) y entregarme a este gran género del historias pénicas.

    Vrabo por el post.

    Sin más tonterías,
    Tomy

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    1. Gracias por no contarnos más tontería amigo Tomy, y siga estudiando tan interesante materia.

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  68. Estaba un poco tristona y sin ganas de nada, pero me has hecho reirme de buena gana y que mi dia sea un poco mejor. Graaaaaaaaaaaaaacias.

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  69. Por la Madre de Satán¡¡¡¡.
    El mejor post de este blog. No, vale, el mejor no. Pero top 5. Fijo.

    Ovación, aplausos, reverencias.

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  70. Una vez más me quito el sombrero y me humillo ante vuetros sudoroso pies.

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  71. Impresionante post épico. Casi lloro de emosióng.

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  72. Respuestas
    1. Pregúnteselo usted si quiere. no tengo intención de volver.

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  73. Respuestas
    1. Me temo que hoy nuestro rival nos ha baqueteado con una inmerecida victoria.

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  74. Que forceps para ortodoncia más extraño,,,,

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  75. Cuantas cosas tiene en común ese dentista conmigo,,,

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  76. Que increiblemente... sórdido.

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  77. Madredediosvirgensantísima... Esa consulta fue la culpable de que, siendo yo un ñajo prepúber, mi familia me prohibiera terminantemente acercarme a menos de 50 metros del dentista del barrio.

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  78. Que bueno es usted, caballerete, que facilidad para relatar historias cotidianas bien complementadas con aparente humor vulgar, ordinariez y ese brillante toque escatologico.

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  79. Me apunto a la COLA, de ese dentista

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Amable visitante:
Es usted libre de inmortalizar su interesante opinión y/o vilipendiar al autor de este absurdo blog si lo considera oportuno.

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